Contratar a un cuidador de personas dependientes

cuidador profesional - personas dependientes

Contratar a un cuidador de personas dependientes

Las familias que deben hacerse cargo de una persona dependiente suelen plantearse la necesidad de contratar a un cuidador de personas en situación de Dependencia. Con frecuencia, los familiares no pueden dedicar 24 horas de atención y cuidados a familiares que, por su enfermedad, necesitan del apoyo de otra persona para realizar tareas básicas del día.

En términos legales, esta persona se denomina cuidador profesional y son contratadas por las familias para el cuidado de un enfermo dependiente. El problema que mucha familias dudan sobre lo cómo contratar a un cuidador de personas dependientes y qué deben tener en cuenta en este proceso. De eso va el post de hoy.

 

La contratación de un cuidador profesional de personas dependientes

A la hora de contratar a una persona que cuide de un familiar dependiente, surgen muchas dudas. ¿Hay que darle de alta en la Seguridad Social? ¿Qué hay que incluir en su contrato? ¿Cuánto cobran estas personas? Veamos si podemos aclarar estas dudas.

 

Elegir al cuidador de la persona dependiente

Este es el primer paso y puede resultar el más complicado. Cuidar de una persona que no puede valerse por sí mismo para realizar tareas básicas es un trabajo que no puede hacer cualquiera, y es normal que las familias se esfuercen por encontrar al cuidador ideal.

El cuidador profesional no sólo debe tener la adecuada formación, también debe asumir labores como:

  • Atender a la persona que cuida y ayudarle a manejarse en el día a día
  • Asear a la persona que tiene a su cargo mantenerla limpia para evitar rozaduras o escaras si permanece mucho tiempo en cama.
  • Puede encargarse de su alimentación, así como de mantener la limpieza de su entorno.
  • Lleva el control de la medicación y puede estar capacitado para realizar algunas atenciones sanitarias como terapias de rehabilitación, control de la tensión o incluso tomar muestras para análisis.
  • Acompaña al dependiente en sus traslados médicos.

 

El contrato del cuidador

Un cuidador de personas dependientes, a ojos de la legislación laboral es considerado como un empleado del hogar y está sujeto a los mismos derechos y las mismas cotizaciones que una persona que ofrece servicios de limpieza a domicilio. Asimismo, desde el año 2012 este empleo está incluido en el Régimen General de la Seguridad Social.

Al contratar a un cuidador profesional es recomendable formalizar un contrato por escrito, en el que se establezcan las condiciones de la relación laboral.

  • Horario
  • Tareas domésticas
  • Cuidados
  • Supervisión y asistencia sanitaria

De esta manera, se podrá establecer un periodo de prueba, que no puede superar los dos meses, y es posible elegir entre un contrato indefinido o un contrato temporal.

 

¿Qué cobra un cuidador profesional de una persona dependiente?

Como mínimo, el sueldo de un cuidador debe respetar el salario legal establecido para un empleado del hogar, que es el mínimo interprofesional.

Precisamente, en 2019 el SMI ha subido un 22% y se ha fijado en 14 pagas de 900 euros al mes, si se trabaja a jornada completa y 7,04 euros la hora si el contrato es de menos horas.

Esta cuantía no puede reducirse aunque exista una retribución en especie, como pueden ser las comidas o la estancia en la vivienda, en el caso de que el empleado del hogar sea interno.

En las pagas, ya sean por horas o a jornada completa, se debe incluir la parte proporcional de descanso semanal, vacaciones y festivos.

Además, desde el 1 de enero de 2019, el tipo de cotización y su distribución entre empleador y empleado es el que se establece con carácter general para el Régimen General de la Seguridad Social. Es decir, un 28,30% del que el 23,60% corresponde al empleador y el 4,70% al empleado de hogar.

 

Dar de alta en la Seguridad Social al cuidador

A un cuidador profesional que contratemos para asistir a un familiar hay que darle de alta en la Seguridad Social. Hay que hacerlo el mismo día que el cuidador se incorpore al trabajo. Esto es muy importante por si el trabajador sufriera algún accidente durante su horario de trabajo.

Como ves, un cuidador puede ser muy necesario cuando hay una persona dependiente en casa, pero costear sus servicios no es barato para la economía familiar. Hay ayudas públicas, pero son lentas y no cubren todos los gastos. Al final, son los familiares los que soportan el mayor esfuerzo económico para cuidar de las personas dependientes.

El Seguro de Dependencia puede ayudar a sobrellevar esa situación. La indemnización de esta póliza, que en ocasiones se puede cobrar en forma de renta vitalicia, sirve para afrontar este y otros muchos gastos derivados de ser dependiente. Y contratar un Seguro de Dependencia barato es muy fácil. Contacta con nosotros y te llamaremos.

Siguiente Anterior